La belleza y las arañas
En mi jardín, en invierno, entre las ramas del romero aparecen las Argiope Argentata , las hermosas arañas tigre. Las hembras pueden ser reconocidas con facilidad por su vientre abultado color plata, negro y dorado, y son bastante grandes, llegando a medir fácilmente 5 centímetros. Esta araña se queda en el centro de su red y permanece quieta a la espera de que algún insecto quede atrapado. Su telaraña es hermosa, una de las más regulares y densas. Con seda verde envuelve sus huevos y los deja muy cerca de la telaraña, escondidos tras alguna de las hojas del arbusto en el que está tejida su red. Es una especie muy pacífica y se debe sentir muy amenazada para atacar. Tiene un veneno muy suave, de poca duración para los humanos, así que siempre tratará de huir en lugar de atacar. En casi todos los fenómenos naturales podemos encontrar distintas formas de belleza, como la armónica y proporcionada de las telarañas o la disruptiva y enérgica de los rayos. Es más, las especies han evolucio